Dilución alternativa ¿intervención poética?

 No soy nada,  nunca seré nada, no puedo querer ser nada, fuera de eso, tengo en mi, todos los sueños de este mundo: escribió Fernando al mirar o imaginarse mirar una tabaquería desde los ojos de otra persona, un tal Álvaro; yo tampoco soy nada, pero resolví una fórmula para ser algo, contra la nada que empiezan a ser esas personas caminando allá abajo, hace un rato llovía, llovía tanto que ya se había diluido casi del todo el poema que la brigada de acción poética escribió en el muro de enfrente, apenas se podía leer:

“y a veces los arcoíris también pueden ser de un solo color”

 Pero esas palabras y las cervezas que recién bebí potenciaron una alternativa, porque cuando venía subiendo las escaleras me concentraba en que, para dejar aquellas personas y yo de ser nada; habría que aventarse y ya, escampaba, la gente ya salia de sus guaridas para seguir con su camino cotidiano, se les veía pasar frente al muro sin reparar en que su poema del arcoíris pronto se perdería para siempre, fue esa la revelación de que había una alternativa, o bien tirarme y que con un poco de suerte, al ser algo diluyéndome en un charco rojo en pos de la alcantarilla, pudiera descolocar su camino hacia la nada; o bien ser su leprechaun, y corroborando la hipótesis de acción poética, compartirle a  aquellas personas desguarnecidas, el oro diluido al otro lado de un potente y espontáneo arcoíris de un solo color…